INVERSIONES CHINAS. PRIMERO PANAMÁ.

Según cifras de la Contraloría General de la República (CGR) para el 2019 la inversión China en Panamá fue de 45 millones de dólares (anual) y la inversión acumulada hasta ese año alcanzaba los $369 millones.  Para el 2021, publicaciones consultadas señalan que luego del establecimiento formal de las relaciones diplomáticas entre el gigante asiático y nuestro país, China ya sumaba inversiones valoradas en 2.500 millones de dólares. Expresan además, que solo en inversión extranjera directa, en la última década las empresas chinas han desembolsado hasta 1.000 millones, con Huawei como punta de lanza en la zona libre de Colón.

Con el inicio de las relaciones diplomáticas con la República Popular de China, han aumentado la presencia de las empresas asiáticas en el istmo panameño. Llama la atención los nombres de grandes empresas chinas instaladas o con intenciones de instalarse en el país. Entre ellas, Construction Company, China Harbour Engineering Company (CHEC), China Construction America (CCA), Shangai Gorgeus, China Tiesiju Civil Engineering y China Railway International, entre otras. Se suma el establecimiento de dos bancos gigantes en la ciudad capital: el Banco Industrial y Comercial de China (ICBC, por sus siglas en inglés) y el Banco de China.

Sin embargo, las inversiones de China en el sector panameño de infraestructura disminuyeron drásticamente con el inicio del gobierno de Laurentino Cortizo. Lo que se vio fue un bajón en la intensidad de proyectos de infraestructura en el país. Las conversaciones comerciales con China fueron congeladas, varias ofertas de infraestructura salieron fallidas y muchos proyectos cancelados.

Esta situación puede cambiar para beneficio de China luego de las declaraciones del presidente Cortizo anunciando sus intenciones de reiniciar de inmediato las negociaciones de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con el gigante asiático, reforzar las relaciones bilaterales y promover la inversión con China. 

En junio de 2016, Panamá inauguró la ampliación de su Canal. En junio de 2017, el gobierno panameño decidió establecer relaciones diplomáticas con China, dando así pie al flujo de nuevas inversiones chinas en el Canal, nuestro mayor activo logístico y que no costó toda una lucha generacional para sacárselo de las manos a los norteamericanos. 

El Panamá de hoy tiene un Canal con dos puertos con sede central en China (Hutchinson Ports - Panama Ports Company, Balboa y Cristóbal establecida en 1997 y Singapur -PSA Panama International Terminal establecida en 2007), uno con sede en Taiwán, uno en Singapur y uno en EE.UU.

Entusiasmados especialistas señalan que el reto panameño es el de aprovechar esta “oportunidad de oro”. Sin embargo, estamos profundamente convencidos que el mayor reto es conseguir que esta mayor relación con China y el mercado asiático beneficie estructuralmente a Panamá y no a grupos económicos específicos. Además, que esta relación comercial no degenere en una futura situación de dependencia.  

Panamá, 26 de julio de 2022.

 



PANAMÁ ENTRE CHINA Y EE.UU.


 La Unión Europea ha acordado intensificar las relaciones con América Latina y Caribe para ganar presencia política y comercial en una región en la que China se ha convertido en un socio prioritario para muchos de sus países.

Por su parte, Estados Unidos mantiene en el punto de mira la creciente influencia de China y Rusia en América Latina por las preocupantes consecuencias que podría acarrear esta expansión en cuanto a la inestabilidad, la inseguridad y la debilidad de las instituciones democráticas. 

A su vez, los países del G7 pusieron en marcha un gran programa de inversiones de 600,000 millones de dólares para países en desarrollo, pensado para responder a las grandes obras financiadas por China. 

Los occidentales desean desmarcarse de China, que invirtió masivamente en muchos países para construir infraestructuras a través del programa llamado la “Nueva Ruta de la Seda”.

¿CÓMO ESTÁ PANAMÁ POSICIONANDO SU AGENDA FRENTE A ESTE ENTORNO GEOPOLÍTICO?

En la etapa inicial del Gobierno de Laurentino Cortizo, las conversaciones comerciales con China fueron congeladas, varias ofertas de infraestructura salieron fallidas y muchos proyectos cancelados. Sin embargo, en abril del 2022, Panamá inició una gira por Asia con la cual se buscaba reforzar las relaciones bilaterales y promover la inversión con China.

China tiene a Panamá entre sus principales objetivos de inversión en América Latina para los próximos años. Pekín viene incrementando su posición comercial en el mundo y Panamá es una plataforma clave a escala global en la estrategia china. Luego de la gira mencionada, el presidente Cortizo anunció sus intenciones de reiniciar de inmediato las negociaciones de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con el gigante asiático. 

La renegociación del TLC con China tomó fuerza cuando el gobierno brindó la idea de seguir adelante sobre el tema si no lograba un acuerdo con la revisión de los términos y condiciones del programa de desgravación de cuatro renglones sensitivos en el tratado de promoción comercial (TPC), que tiene con Estados Unidos. Los Estados Unidos ya dijeron que no se va a renegociar nada del TPC. Por otro lado, a Washington no le gusta nada la creciente presencia inversora de Pekín en Panamá. 

¿CUENTA EL PAÍS CON UN PLAN ESTRATÉGICO?

Por el momento no se logró nada con la solicitud de renegociación del TPC con los EE.UU. Con respecto a China, los especialistas señalan que un TLC con China no se puede decidir de un día para otro, porque se debe analizar y presentar un plan estratégico que se basa en las variables del entorno geopolítico. Se debe hacer un plan estratégico sobre qué quiere lograr, antes de hablar de un TLC con China.  Lo cierto es que hasta el momento el gobierno no ha presentado un plan estratégico, ni metas sobre lo que quiere lograr en el tema de un TLC con China. 

Cualquier negociación que implique los intereses nacionales debe ser acompañada con el obligatorio acercamiento con el sector privado y el resto de la sociedad civil. En este tema sobran las preguntas y pocas son las respuestas. 

Panamá, 23 de julio de 2022.